Estuvimos en “Versus”, una expo de Antonyo Marest & Misterpiro, donde sus obras están en un duelo constante, tanto por su disposición, como por su disparidad técnica, como en sus temáticas, incluso entremezclándose en alguna ocasión. Cabe destacar los acabados en las obras de Marest, ya fuera en maderas o lienzos, el resultado de aplicación del color y los patrones eran finísimos, con una clara y fuerte inspiración en “Grupo Memphis”. En cuanto a Misterpiro, sus obras hicieron descansar nuestros ojos de los colores planos y más saturados del citado Marest. Mezclas acuosas de colores que campaban a sus anchas por las formas que acababan cerrando sus iconos, donde los formatos variaban por completo entre pinturas y esculturas, con algún toque psicodélico.
En definitiva, tanto por el contraste de las obras de los artistas, como por la música, como por el propio Monkey Garage, esta visita fue sin duda una buena elección en una semana que estuvo plagada de exposiciones marcada por la edición de Arco.